viernes, 29 de enero de 2010

Lágrimas


Llorar. Dejar que tu vista se nuble y se ponga acuática. Llorar y dejar que se humedezcan las mejillas con gotas saladas. Llorar y lamerse los labios cuando allí desenbocan las lágrimas. Llorar para decir muchas cosas o por nada. Llorar hasta empezar a sentir que la cabeza se va a reventar. Llorar y quedar con el sabor de las lagrimas en la garganta, con el pecho apretado o suelto. Llorar te hace sincero o miserable. ¿Enfermo o sensible? Depende de la ocación, depende del corazón. Ojalá tuviera una balanza para saber qué prima en mi vida el llanto o la sonrisa. Si me miro la cara sé por las arrugas de mis ojos que el llanto. Pero, yo aprendí a sonreir con los ojos y a reír con mis lágrimas, no es metáfora. Hay personas que tiene verguenza de llorar frente a los demás, es algo más íntimo. Hay personas que tienen verguenza de reír con los demás, es algo más íntimo. Yo sé que en ese momento especial, es más especial, la felicidad se me hizo borrosa y mojada.





1 comentario:

Ladrona de servilletas dijo...

"la felicidad se me hizo borrosa y mojada" ... muy buen final..
lindo, lindo.
un beso...