Y aveces se disuelven...(Destellos)

Me senté a esperar que la vida me supiera menos amarga.
Que los caminos fueran más coloridos y luminosos.
Que las voluntades, de una buena vez, coincidieran.
Me senté a esperar que la vida, ¡por favor!,
Me supiera menos amarga.
Me senté en la orilla de mi cama, junto a la ventana,
Recibiendo el cálido soplo de las luces naranjas.
Para esperar, porque me cansé de buscar.
Buscar lo que necesitaba, pero nunca llegó.
Buscar que al cerrar los ojos, el universo continuara creciendo,
Y todos los puntos de colores, dieran vida a un lugar mejor.

Me senté a contemplar la expresión de sus rostros
Me senté a esperar…como nunca, tan sólo a esperar.
Y así me quedé.

Una espera de buenas intenciones, de gestos sinceros
De un poco de bondad, de un mínimo de arrepentimiento.
La espera que contiene una ilusión, una confianza, una proyección.
La espera que necesitaba…
La espera que me hizo tanto bien.
La espera que me dejo más liviana,
Más llena de mí y de lo que amo.

Porque me senté a esperar que se ganaran mi querer.
No más gratuidad, no más…
Pero, no va a parar y no voy a cambiar.

Veo el camino con nuevos colores.
El viento se llevo toda inseguridad.
Y haré todo lo que quiero hacer.
Y continuaré compartiendo alegrías y tristezas.

Puedo cerrar los ojos y ver los destellos coloridos…
Que se expanden, que se contraen…que se disipan
Y continúan aumentando el espacio que contiene
Nuestras entregas y egoísmos…
El espacio en que todos somos un poco nada y un poco todo
El espacio en que regamos nuestras intenciones
El espacio en que regalamos, vendemos o cambiamos;
Besos, cariños, abrazos, “te quiero”… “ya no más”…

//Save me, Aimee Man//